lunes, septiembre 12

metatarso

Fórmula Metatarsal


Las metatarsalgias suponen un alto porcentaje de las dolencias del antepie y de la planta del pie. Un gran número de ellas son consideradas como metatarsalgias mecánicas, por exceso de carga. La sobrecarga metatarsal viene dada por la morfología de los metatarsianos y el calzado con tacón:

Altura de los metatarsianos. El arco plantar interno determina la alineación de los metatarsianos. La bóveda metatarsal se ve reducida con la extensión de los dedos. Al caminar, en la fase de impulso, realizamos una extensión metatarsofalángica de unos 60º. Cuando realizamos la extensión de dedos, los 5 metatarsianos debieran estar en línea para un reparto de cargas equitativo.


Podemos analizar la fórmula metatarsal realizando extensión metatarsofalángica pasiva y observar la altura de los metatarsianos. Cualquier apreciación de un hundimiento metatarsal indicará un aumento de presión en ese punto. Las zonas de mayor presión suelen coincidir con las durezas en la piel (helomas).





Longitud de los metatarsianos. La morfología del metatarsiano responde a la necesidad de amortiguar y repartir la carga. En la fase de apoyo de la marcha, el contacto se inicia en el talón y avanza por el borde externo hasta la cabeza del 5º meta, y de ahí, meta por meta, hasta la cabeza del 1º metatarsano, donde se realiza el despegue con el impulso del 1º dedo.




La longitud de los metatarsianos sitúa la cabeza de cada metatarsiano a una altura. Las cabezas metatarsales describen una curva armoniosa de manera creciente desde el 5º hasta el 2º meta.
El 1º metatarsiano debe ser un poco más corto que el 2º. El ángulo de fick es de unos 30º. El pie en ese ángulo de apertura de 30º sitúa al 1º y 2º metatarsiano a la misma altura, para realizar el despegue.

Podemos analizar la fórmula de la longitud metatarsal realizando una flexión meatarsofalángica pasiva, de forma que sobresalgan las cabezas.




Imaginen que tuviesen que trasladar un bidón pesado. ¿Cuál sería la mejor forma? Sin duda, levantarlo de un lado y hacerlo rodar por su contorno circunferencial. Imaginen ahora que ese bidón hubiese recibido un golpe y estuviera abollado. Al hacerlo rodar por el borde y llegar a la zona abollada , el bidón caería precipitadamente aumentando el impacto en ese punto. Eso es lo que ocurre cuando uno de los metatarsianos es más largo.
Un metatarsiano largo se sobrecarga a sí mismo
Un metatarsiano corto sobrecarga a los vecinos




Viladot, en 1989, estableció una clasificación en función de la longitud de los metatarsianos, en lo que llamó Fórmula Metatarsal:
Index minus, cuando el 1º meta es más corto que el 2º y luego el resto van en disminución progresiva. Es el tipo más frecuente (56%).
Index plus-minus, cuando 1º y 2º son iguales y mayores que el 3º, 4º y 5º, decrecientes. Se observa en el 28% de la población.
Index plus, cuando el 1º metatarsiano es mayor que el 2º y este mayor que el 3º. Se presenta con una frecuencia del 16% de la población.


Independientemente de la morfología de los metatarsianos, el calzado constituye un condicionante en la cantidad de presión que recibe el antepie. En condiciones normales, con un calzado plano, el antepie recibirá menos de la mitad del peso corporal. Cuanto más alto sea el tacón, mayor será el porcentaje de peso corporal. Una mujer con 70 Kg que se calce unos tacones con 10 cm recibirá el 100% de su peso corporal sobre el antepie. Supongamos ahora que dicha mujer tiene un hundimiento del 2º metatarsiano. Eso significa que la cabeza de ese meta está aguantando, solamente en estática, 70 kg de presión.
Con la edad, la almohadilla grasa que protegen las cabezas metatarsales, van perdiendo agua y colágeno haciéndose más delgada, haciendo cada vez más difícil el uso de tacones.


No hay comentarios: